sábado, 23 de junio de 2012

Fuck Of hubiera sido muy amable

"Lo bueno de mi ex es que hay muchas cosas malas que decir sobre él."

Hay una delgada línea entre no juzgar por las apariencias, no fijarse en la ropa, el gusto artístico/trivial, (o la higiene básica!!!) y enamorarse de un imbécil, aunque basándome en estas 2 líneas se hace muy obvia.

La canción de Gotye - Somebody that I used to know (con la que estoy actualmente obsesionada) me dio una extraña fuerza para escribir esto, al fin y al cabo ya traté seguir estudiando (ya terminé la Universidad y no veo ninguna diferencia), mantenerme ocupada, cortarme el cabello, comer mucho (pero horneo, así que de paso toda mi familia engorda conmigo), etc, etc; pero nada ha funcionado realmente en mi intención de hacer las paces con "ello"... así que este es mi último intento de expresar con ironía, sinceridad y un amplio margen de auto-burla esta estúpida historia, talvez con esto logre sacarla de mi sistema.

Este post, mi ultimate pesadilla, estará dividido en 3 partes además de esta introducción. Su demasiado realista titulo, lo saqué de la épica breakup song, Do me a favour de los Arctic Monkeys que también me obsesionó en su momento... es que no hay nada más genial que cuando parece que la realidad copiara a la ficción, aunque no niego la gran posibilidad de que a estas alturas, la siguiente historia este algo teñida de la útima.


"How to tear apart the ties that bind, perhaps fuck off, might be too kind"

Complejos y Orgullos de una Geek Contradictoria

Por alguna razón, que supongo debo agradecer a mi mamá, yo nunca quise ser como las demás niñas de mi clase y luego, de adolescente, jamás quise vestirme o maquillarme como mis amigas. Esto llevó a que fuera considerada creída, medio snob, una chancona aburrida y, sobre todo, curiosamente aborrecida por la niña/chica líder wannabe de turno, a quien yo no seguía... por supuesto; afortunadamente en la universidad esto acabó.
La verdad es que he de aceptar que si era (soy) algo o mucho de esas cosas que me decían y que eso proviene (y acá entra en la cuestión mi mamá, más mi papá, mis tías y casi todos mis parientes adultos) del hecho de que siempre fui admirada en mi casa y me hicieron creer (en la búsqueda de forma una autoestima elevada) que era muy especial, bonita, inteligente, etc, etc.
El recelo de los demás provocaba que me sintiera inadecuada y que se revertieran los esfuerzos de mi familia por darme seguridad. Al ir creciendo esto se convirtió en una tendencia a tener amigos superficiales y que a veces más parecían interesados por mi tarea que otra cosa e hizo que me protegiera a mi misma, sintiéndome ligeramente superior a los demás (lo que, obviamente, no ayudó con los problemas mencionados).

Al llegar a la preadolescencia era aparentemente delgada y los chicos parecían ponerse de acuerdo con mi mamá con el pasar de los años; pero ya que jamás se me pasó por el cerebro matarme de hambre por un pantalón y la clase que más odiaba era Educación Física... la gente empezó a estar en desacuerdo, pronto me vi más "ancha" y menos "arreglada" que las demás. Yo creo que luzco normal y no pienso hacer nada para parecerme a nadie y dejar de sentirme cómoda, nunca me he sentido de verdad bonita o al menos de la forma que las demás chicas. Odio las faldas cortar, las sandalias y los Stilettos con plataforma (pero disfruto de un buen desfile de modas); entiendo el punto del maquillaje aunque no lo comparto; pero no entiendo el punto del perfume dulzón de Cyzone... ¿Por qué la gente no se baña con un buen jabón y ya? Aunque realmente no soy "gorda" siempre me siento más "grande" que mis amigas, tiendo a pensar que las chicas muy arregladas son tontas y odio a las mujeres demasiado delicadas para matar una araña. Siempre fui la inteligente, jamás la bonita (ahora se entiende porque las odio ¿no?), mis amigos me llamaban para pedirme la tarea y nada más y para terminarla, el único chicho que se enamoró de mi lo hizo viendome todos los dias en mi uniforme de colegio católico, así que no creo que fuera por mi cuerpo.

Finalmente concluyo que, después de todo (incluyendo un odioso rompimiento) soy una Geek a quien le importa talvez demasiado la música, TV, libros y la buena comida; que prefiere las zapatillas, las botas con pasador y las camisas grandes a los mini vestidos y los zapatos imposiblemente incómodos... pero obviamente, aún estoy buscando algún otro tipo de aprobación y ya que ni siquiera soy popular en las redes sociales... escribo este blog como un intento de lograr aquello, cayendo en una completa contradicción con todo lo que acabo de decir.

Parece que eternamente me debatiré entre estar satisfecha con ser "diferente", especialmente ahora que está tan de moda, y la insistente manifestación mental de mi adolescente interna de 14 años que quisiera ser alta, delgada y llamativa como muchas de sus amigas.